Edad: 37

Altura: 1,70

País: Inglaterra, aunque vivió en Venezuela desde su adolescencia.

Idiomas: Inglés y español. Además tiene cierto conocimientos de francés

Profesión: Gerente y propietaria del parque de Ciudad Mágica

Esta mujer es la responsable de toda la diversión y exoticismo de Ciudad Mágica. Esta mujer británica-venezolana heredó el parque que de otrora perteneciera a su padre, Alexander Bradford. Él quería que su hija perpetuara su legado y siguiera el negocio familiar de generación en generación. Por supuesto, Louise no negó esta emocionante oferta, así que al igual que su padre, ella mantiene a Ciudad Mágica viva.

Extrovertida, humilde, de habla suave y muy cortés, Louise es una mujer de palabra. Aunque a veces peca de ser fría y distante, Louise desarrolló un amor y devoción intensas a su parque y sus humanoides, a quienes observa como sus hijos y los protege sin importar lo que pase.

Un día un hombre le trajo una pareja de criaturas que llamaba "humanoides". Al inicio Louise estaba escéptica, pero tras una demostración dada por ambos humanoides, estaba deleitada y aceptó darles albergue. Luego de un tiempo, ella les ofreció trabajar como atracciones vivientes bajo la supervisión de un control master. Entonces mandó a erigir una residencia con habitaciones equipadas con armarios y literas para que los humanoides durmieran luego de trabajar.

Desde ese día, la clientela subió. La gente venía interesada a ver a las criaturas que por magia se convertían en atracciones mecánicas y trabajaban por cuenta propia. Louise se dio cuenta que tenía una mina de oro en sus manos, así que decidió darle albergue a cada humanoide que se lo solicitara. A medida que el tiempo pasaba, ella reemplazó atracciones mecánicas con áreas de trabajo donde sus humanoides podían transformarse y trabajar. El mantemiento de los humanoides era mínimo en comparación con el costo de mantener atracciones mecánicas.

Además, con los contactos apropiados, Louise firmó con varias compañías proveedoras de agua electrificada, que era el único alimento requerido para los humanoides. De paso, terminó remodelando la residencia para ampliarla y así tener habitaciones disponibles para nuevos humanoides.